Mano amiga la montaña

Turgua
directora
Donatina Giuliani

Mano Amiga La Montaña, un compromiso cargado de esperanza

fundado en 2004

Desde el momento en que llegué a Mano Amiga La Montaña, supe que estaba aceptando una responsabilidad que iba más allá de la gestión educativa. Este colegio, que se dedica a brindar oportunidades a los niños y jóvenes de la zona rural de Turgua para que transformen sus vidas, representa para mí un símbolo de esperanza, evangelización y un faro de luz en medio de la adversidad.

En Mano Amiga, además de proporcionar un buen nivel académico, también trabajamos por evangelizar y proporcionar herramientas para transformar vidas. Cada día, vemos cómo los niños, a pesar de las dificultades económicas y sociales, llegan con una sonrisa y una disposición para aprender. Nuestro compromiso es asegurar que cada uno de ellos reciba una educación de calidad, que les permita alcanzar sus sueños y convertirse en agentes de cambio en sus comunidades de la mano de Dios Nuestro Señor.

Uno de los valores fundamentales de nuestro colegio es la solidaridad. Aquí, cada miembro de la comunidad escolar, los benefactores y patrocinantes, los estudiantes, los profesores y el personal administrativo, trabaja en conjunto para crear un ambiente de apoyo mutuo.

Me permito destacar el gran aporte que nos brindan los benefactores quienes, por medio del Plan Padrino y  patrocinios son el motor que mantiene activo todo el proyecto.

Agradecimiento, respeto y compromiso son valores que se inculcan profundamente en Mano Amiga. Vivimos el agradecimiento a nuestros benefactores a través del trabajo arduo aprovechando al máximo sus valiosos aportes, la dedicación a los estudios y la constancia en nuestras oraciones en acción de gracias. Fomentamos un ambiente donde cada persona es valorada y respetada, esto nos ayuda a vivir el valor del respeto mutuo. Asimismo, el compromiso de cada miembro de la comunidad escolar es esencial para el éxito de nuestra misión. Este compromiso se refleja en la dedicación de los profesores, en la perseverancia de los estudiantes y en el apoyo incondicional de los benefactores.

Ser miembro de un colegio como Mano Amiga La Montaña conlleva múltiples desafíos. Existen dificultades, pero cada victoria, por pequeña que sea, representa un paso hacia un futuro mejor. Ver a nuestros estudiantes graduarse, obtener becas para continuar su educación y regresar para agradecer, son momentos que fortalecen nuestra convicción de que estamos haciendo una diferencia significativa.

Mano Amiga es más que un colegio; es una comunidad. Aquí, los estudiantes encuentran un segundo hogar, donde se sienten seguros y apoyados. Las amistades que se forjan, las lecciones de vida que se aprenden y los sueños que se comparten, crean un vínculo que trasciende y transforma. Esta comunidad es un testimonio de lo que puede lograrse cuando se trabaja con el apoyo de quienes creen en nuestra labor formadora.

Mirando hacia el futuro, nuestra mayor esperanza es que Mano Amiga continúe siendo un lugar donde los sueños se hacen realidad y para ello contamos con quienes nos quieran apoyar con sus aportes económicos. Queremos seguir viendo a nuestros estudiantes prosperar, convertirse en líderes y regresar para contribuir en sus comunidades.

Finalmente, ser directora del Colegio Mano Amiga La Montaña ha sido una experiencia profundamente enriquecedora. He aprendido tanto de nuestros estudiantes como ellos han aprendido de nosotros. Cada día, me siento inspirada por su valentía, su alegría y su determinación. Este colegio ha dejado una huella imborrable en mi corazón y me ha enseñado que, de la mano de Dios Nuestro Señor, con esfuerzo, solidaridad y amor, cualquier meta es alcanzable.

En resumen, ser directora de Mano Amiga La Montaña es más que un trabajo; es una vocación, una misión y una fuente constante de inspiración. Estoy agradecida por cada persona que forma parte de esta increíble comunidad y por cada oportunidad de marcar una diferencia en la vida de nuestros estudiantes. Con gratitud y esperanza, seguimos trabajando por transformar vidas.

nuestros servicios

Actualmente ofrecemos los siguientes servicios a nuestros estudiantes y a la comunidad en nuestra sede de Turgua.

Académicos

Con capacidad para más de 300 alumnos, ofrecemos pre-escolar, primaria y bachillerato.

atención médica

Brindamos desayuno y almuerzo diario, evaluación nutricional, servicio odontológico y chequeo médico para todos nuestros estudiantes.

deportes

Actividades vespertinas como fútbol, béisbol, basketball, kickinball y volleyball.

Cultural

Ofrecemos a nuestros alumnos actividades para la paz a través del arte y la música.

nuestro campus

innovación y formación de calidad

Nuestra planta física en Turgua cuenta con 14 salones de clases con capacidad para 25 alumnos; 3 laboratorios para clases de biología, química y física, 2 salas de computación, todos medianamente equipados; 1 salón de usos múltiples con capacidad para 400 personas, 2 bibliotecas, 1 salón de arte, 1 salón de audiovisuales, 1 cancha de béisbol, 1 cancha de futbol, 2 canchas de básquet, 1 parque infantil, 1 comedor, 1 módulo de atención médica y una capilla. Aun nos falta mobiliario para estos espacios.

Contamos con un excelente equipo de trabajo, personas muy comprometidas con la misión de Mano Amiga, que se preocupan y ocupan de manera personalizada, tanto de la formación académica, como de la espiritual y del entorno familiar y social de nuestros estudiantes. Adicionalmente nos hemos abocado a procurar que estén bien alimentados y sanos, entendiendo que un niño con hambre no puede estudiar, por lo que todos trabajamos en la búsqueda, elaboración y entrega de alimentos diario para todos nuestros estudiantes y con el apoyo de grandes aliados hemos logrado llevar un control nutricional de todos y hacerles chequeos médicos regulares, apoyándoles en cualquier dificultad que se presente.

egresados

Más de 180 egresados de mano amiga turgua

En el 2012 logramos nuestra primera Promoción y hasta la fecha tenemos IX Promociones.

184 egresados, de los cuales 55 (30%) están en las mejores universidades del país y ya 15 (8%) son profesionales: Ingenieros, Lic. Comunicación Social, Administración de empresas, Psicopedagogía, etc.

¡No queremos bachilleres! Necesitamos continuar con la labor y seguirles apoyando, para que logren ser profesionales, hombres y mujeres de bien. ¡Esos que tanto necesita Venezuela!

Pero, el ingreso a las universidades, requiere de un esfuerzo económico que ni ellos, ni nosotros podemos afrontar y encuentran muchas dificultades, como falta de: transporte, alimentos, materiales de estudio, etc. Es por esto que hemos creado el programa de seguimiento y apoyo a nuestros egresados y ya tenemos una residencia estudiantil para jóvenes egresadas de nuestro colegio.